El caso llevaba varios años en la justicia federal. La joven se negaba a realizarse los exámenes genéticos hasta que, conforme a la ley, la Justicia ordenó la extracción y su ADN pudo ser analizado por el personal del Banco Nacional de Datos Genéticos (BNDG) y no por el Cuerpo Médico Forense como había solicitado la defensa. Finalmente, el 5 de abril de 2011 los resultados confirmaron que se trataba de la hija de Cecilia y Ricardo.
Cecilia nació en la ciudad de Buenos Aires el 21 de junio de 1951. Su familia la llamaba "La Negra". Ricardo nació el 24 de mayo de 1951 en Venado Tuerto, provincia de Santa Fe. Sus amigos lo llamaban "Patón". En 1974 nació Ana Lina, hija de Ricardo con su primera compañera, Liliana Bojanich, desaparecida el 8 de junio de 1976. Cecilia y Ricardo militaban en el PRT-ERP. A ella la apodaban "Mecha" o "Mercedes" y a él "Juan de Dios Pérez" o "César".
Tras conocer la verdad, María Pía pudo reencontrarse con su familia biológica y con su hermana, que la buscaron desde siempre junto con Abuelas, y así, con su historia, desandar el camino hacia su real identidad. Sus padres continúan desaparecidos.